miércoles, 19 de agosto de 2015

El agua de Texas contaminada con productos químicos usados en el fracking

Un amplio estudio sobre la posible contaminación de las aguas subterráneas debido a la “perforación de gas y petróleo no convencional” reveló la contaminación generalizada del agua potable público y privado del norte de Texas.
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El equipo de la universidad de Texas en Arlington (UT Arlington) analizó 550 muestras de agua recogidas del agua de los pozos públicos y privados de la región Barnett Shale del norte de Texas durante los últimos tres años. Se encontraron niveles elevados de 10 metales diferentes además de la presencia de 19 compuestos químicos distintos entre los que se incluye el llamado BTEX (benceno, tolueno, etilbenceno y xilenos) compuestos asociados con la fracturación hidráulica. El estudio también reveló niveles elevados de metanol y etanol. Fuente (en inglés)


Resumen:



La exploración de las reservas energéticas de esquisto no convencionales y el uso extendido de la fracturación hidráulica durante la estimulación de los pozos han aumentado la preocupación sobre los posibles efectos de la extracción de gas y petróleo no convencional (UOG, por sus siglas en inglés) en el medio ambiente. La mayoría de los informes sobre la contaminación de las aguas subterráneas se han centrado fundamentalmente en el análisis composicional de gases disueltos para determinar si las actividades de la extracción de gas y petróleo no convencional (UOG) han tenido efectos perjudiciales en los acuíferos. Aquí presentamos un análisis de 550 muestras de aguas subterráneas recogidas del suministro público y privado de los pozos de agua que emana de los acuíferos que cubren la formación de esquisto de la región Barnett en Texas. Encontramos múltiples compuestos de compuestos orgánicos  volatiles en toda la región, incluyendo varios alcoholes, la familia de compuestos BTEX, y algunos compuestos clorados. Estos datos no asocian necesariamente las actividades de extracción de gas y petróleo no convencional (UOG) como el origen de la contaminación; aunque proporcionan un fuerte estímulo para llevar a cabo más controles y análisis de la calidad de las aguas subterráneas de la región ya que muchos de los componentes encontrados son conocidos por estar asociados con las técnicas de UOG.



Datos importantes del estudio


·  análisis de 550 muestras de aguas subterráneas recogidas del suministro público y privado de los pozos de agua que emana de los acuíferos que cubren la formación de esquisto de la región Barnett en Texas
·  múltiples compuestos de compuestos orgánicos volátiles en toda la región, incluyendo varios alcoholes, 61, la familia de compuestos BTEX, y algunos compuestos clorados.
·  niveles elevados de 10 metales diferentes y la presencia de 117 compuestos químicos distintos, entre los que se encuentran el benceno, tolueno, etilbenceno y xileno (BTEX).
·  350 muestras provienen de pozos privados que sirven a fines residenciales
·  59 muestras provienen de pozos de agua para la agricultura
·  141 muestras provienen de 152 pozos públicos o municipales que proporcionan agua a las comunidades de todo el Dallas-Fort Worth Metroplex (región del norte de Texas).
·  se encontró metanol y/o etanol en 35 y 240 pozos respectivamente. Tanto el metanol como el etanol se utilizan ampliamente en la perforación no convencional como sustancias anticorrosivas y agentes solidificantes.
·  se encontró diclorometano (DCM) en 122 muestras. [DCM es un disolvente industrial que se ha encontrado en muestras de aire y en el retorno en las zonas de fracturación (fracking)].
·  “Se encontró al menos uno de la clase de compuestos del BTEX (benceno, tolueno, etilbenceno y xileno) en 381 muestras de las 550 recogidas, y 10 pozos tenían cantidades apreciables de los cuatro componentes del BTEX”.
·  “También se comprobó que el tolueno, etilbenceno, y tres isómeros del xileno, son frecuentes en todos los acuíferos de Trinity y Woodbine”.
·  “También se encontró ciclohexano en 221 de las 550 muestras recogidas”


Necesita leer el estudio completo para tener una visión global de todos los puntos anteriores.

El estudio fue publicado por Environmental Science and Technology en junio de 2015