lunes, 24 de agosto de 2015

Bajos precios del petróleo amenazan la bonanza del fracking en Texas


Ningún lugar de Texas produce más petróleo que el condado Karnes, pero de repente la floreciente economía del lugar se está enfriando rápidamente, debido al desplome en el precio del crudo. 
 

Los trabajadores que migraron desde muy lejos en busca de trabajo, persiguiendo la recién descubierta riqueza petrolera son despedidos, abandonan los parques para remolques y retornan a sus hogares. Los agricultores que se convirtieron en millonarios de inmediato gracias a las regalías por sus tierras de pronto se han atrasado en el pago de las cuotas de los nuevos tractores que adquirieron cuando circulaba efectivo. Decenas de cisternas móviles de acero y baños químicos que fueron usados en los omnipresentes pozos se acumulan, sin uso, a lo largo de las carreteras del condado. 
 
Todos esperan el día del juicio final,” dijo Vi Malone, tesorero de Karnes County. “Todo estaba bien y todos recibían esos grandes cheques, y esperaban que les alquilaran sus tierras, y entonces todo se frenó súbitamente alrededor de comienzos de año.
La razón fue el derrumbe del precio del petróleopor debajo de los $45 por barril desde los más de $100 el barril del verano pasado. Luego de una breve recuperación en la primavera, el precio de referencia norteamericano descendió nuevamente en más de un 25 por ciento, desplomándose esta semana a un nuevo mínimo desde la recesión.

La producción record en EE. UU., sumada al frenesí de las perforaciones en Iraq y Arabia Saudita, así como la perspectiva de que el petróleo iraní inunde nuevamente los mercados mundiales, atemorizó a los operadores y los hizo abandonar sus posiciones. Más aún, la propia productividad aquí en el corazón de los yacimientos de shale de Eagle Ford, y los esfuerzos de las petroleras para aumentar su eficiencia, también han contribuido a la superabundancia. 
 
El desplome se ha extendido más allá de los mercados, generando tensión en la economía de toda la región petrolera. En ningún otro lugar es tan evidente el giro brusco de la fortuna como en Karnes County y otras zonas de Texas, North Dakota, Louisiana, Colorado, Pennsylvania, Arkansas y Ohio que tenían escasa producción de petróleo o gas natural hasta que los perforadores descubrieron como acceder a la roca sólida de esquisto en las profundidades.

La gente no tenía que trabajar más,señala Elliott Skloss, fabricante de carteles para el departamento de vialidad y puentes,Ahora deberán trabajar o mendigar si el precio del petróleo no se recupera.” Sus granjas familiares tenían cinco pozos de gas y petróleo que el año pasado generaban ingresos de $50,000, pero ahora ganan la décima parte debido a la caída tanto del precio como de la productividad del pozo. 
 
Los derechos mineros por los que se llegaron a pagar $40,000 por acre para el mejor lugar del Karnes County ahora valen $15,000. La base tributaria total del condado cayó este año por primera vez desde 2010, en más del 20 por ciento.

Muchas empresas petroleras, entre ellas Royal Dutch Shell y Chevron, han tenido que reducir sus plantillas de personal este verano. 
 
Chesapeake Energy, que cuenta con preciados activos en Eagle Ford, recientemente recortó sus dividendos para ahorrar efectivo. Otro productor de Eagle Ford Linn Energy, productora de energía con formato de sociedad de responsabilidad limitada, asombró a Wall Street recientemente al anunciar su intención de suspender los pagos de utilidades a los inversores para conservar efectivo.

Los productores que han estado protegidos por contratos que les permitían vender petróleo a precios superiores a los de referencia están gradualmente quedando expuestos al vencimiento de esos acuerdos. El precio deprimido del petróleo está limitando la capacidad de las empresas para pedir préstamos y deben afectar sus activos sobre el terreno como garantía para préstamos.

Un resultado, según los analistas, será la dolorosa concentración de los productores de petróleo a medida que los débiles y endeudados se ven obligados a vender sus activos a los fuertes. 
 
La consultora IHS recientemente estudió 66 empresas y determinó que solo en el primer trimestre del año debieron disminuir el valor contable de alrededor de $29 miles de millones en el valor de sus activos, superando fácilmente el total para todo el año 2014. La venta de activos devaluados de una empresa a otra ya ha comenzado en Eagle Ford, y se espera más concentración.

Swift Worldwide Resources, un reclutador para la industria petrolera con sede en Houston, calcula que los despidos en los campos petroleros superaron los 176,000.

Hace solo cinco años, el condado Karnes era un punto en la región petrolera, su producción era un error de redondeo en un estado históricamente atado al petróleo. 
 
Entonces llegó la fractura hidráulica, o fracking, y el aumento en la producción petrolera que trajo consigo. 
 
Pueblos hasta entonces deteriorados se reinventaron con nuevos restaurants, mercados y hoteles, a medida que se generaba dinero y oportunidades de empleo. 
 
Comenzó la construcción de nuevas escuelas y de un gran hospital para acoger a los nuevos residentes.

Hoy, incluso con el precio del petróleo desplomándose, ningún condado en Texas se acerca a producir tanto crudo como Karnes — 6.8 millones de barriles solo en junio. Veinte plataformas de perforación como ConocoPhillips, EOG Resources y Murphy Oil continúan perforando la roca sólida que subyace a miles de pies de profundidad.

La mayoría de los funcionarios locales sostienen que el condado todavía tiene un nivel de vida mejor que antes del auge del shale, cuando era uno de los más pobres del estado. Entonces, el principal empleador era la cárcel local y varios ranchos se habían visto obligados a vender su ganado luego de años de sequía. 
 
A pesar de la recesión, el petróleo continúa fluyendo, gracias a las mejoras en eficiencia de los productores. 
 
Durante el segundo trimestre del año, por ejemplo, la producción de Marathon Oil de gas y petróleo en Eagle Ford en promedio aumentó 32 por ciento en comparación con el mismo trimestre del año pasado. 

 
 
Pero incluso esos días están destinados a terminar. Con la cantidad de plataformas de perforación ahora reducida a 79 desde su máximo de 206 hace solo nueve meses, y con la producción de un pozo de shale disminuyendo hasta un 60 por ciento al año siguiente de ser perforado, la producción está condenada a un abrupto descenso en los próximos meses aunque los precios se recuperen. 
 
Con la cantidad de petróleo sobre la que estamos sentados, es devastador que no podamos sacarlo,afirma Matt Kibodeaux, gerente local de proyecto para Energy Maintenance Services, una empresa con sede en Houston . La compañía, que instala las tuberías que conectan las plataformas con tuberías de mayor tamaño aquí, empleaba a 186 personas el año pasado y ahora solo a 18.

En un cobertizo detrás de la oficina de Kibodeaux, un grupo de trabajadores tendidos en la parte de atrás de un camión en las sombra intentaban soportar los 100 grados de calor.

Cuando vienes a trabajar, no sabes si te van a decir que te vayas a tu casa,” dice Omar Marquez, 69, coordinador de seguridad de proyecto que acaba de volver de controlar a los trabajadores que pintaban con aerosol las tuberías. “Estoy trabajando para pagar mis deudas, pero ahora se dificulta por cómo le está yendo al negocio del petróleo.”

Las empresas locales de servicios están sufriendo debido a que los principales operadores están recortando costos y obligándolas a reducir precios y honorarios. 
 
Supreme Vacuum Services, que se encarga de los efluentes del fracking y de las aguas residuales de los pozos petroleros, está recibiendo un 20 por ciento menos este año por sus servicios. Con ingresos y ganancias considerablemente reducidos, ha recortado las horas de sus choferes, despedido a los menos eficientes e instalado un nuevo software en la oficina para reemplazar a los asistentes administrativos. De una nómina salarial promedio de 92 empleados el año pasado, ha pasado a 75, según la gerencia local. 
 
Hay un punto más allá del cual no puedo seguir recortando mis precios,” dijo Brooks Holzhausen, el director de operaciones de la empresa aquí. “A medida que recortas, sacrificas seguridad y calidad, y no lo voy a hacer.”

En todo caso, los funcionarios locales afirman que su condado aún está destinado a un gran futuro una vez que los precios del petróleo se recuperen, algo que según ellos seguramente sucederá. 
 
Probablemente seremos los últimos en declinar, o caer, si quiere,” señaló Don Tymrak, el alcalde de Karnes. “Pero también seremos los primeros en percibir la recuperación.”


Traducción del artículo "Low Oil Prices Pose Threat to Texas Fracking Bonanza" punlicado el 14 de agosto en The new York Times