La iniciativa de llevar a cabo una votación dará a los habitantes de Colorado el control local del desarrollo petrolífero y de gas en sus comunidades
El viernes 21 de febrero, una coalición de grupos que se han hecho llamar Control local de Colorado envió un documento al Consejo Legislativo de Colorado en el que solicitaban una enmienda constitucional que dotase a las comunidades locales de Colorado del control sobre si conceder permiso para que se practicasen métodos controvertidos de fracking para la extracción de petróleo y gas (fracturación hidráulica) en sus comunidades. La iniciativa es consecuencia de las débiles normas presentadas por el gobernador Hickenlooper de calidad del aire, que no protegen a los habitantes de Colorado de los peligros inherentes de sanidad y seguridad relacionados con el desarrollo del petróleo y del gas y el fracking.
«Mi primera responsabilidad es hacia mis hijos, para asegurarme de que crecen en una comunidad saludable», declaró Laura Fronckiewicz con el grupo Nuestro Broomfield. «El gobernador Hickenlooper no nos ha protegido del fracking. Por ello, es necesaria esta votación para asegurarnos de que tenemos el derecho de determinar si se permite el fracking al lado de nuestras casas y colegios».
En los últimos 15 meses, cinco comunidades de Colorado han hecho historia aprobando medidas locales de votación para frenar el fracking en las ciudades de Longmont, Fort Collins, Boulder, Lafayette y Broomfield, a pesar de los casi 1.3 millones de dólares en total que ha gastado la industria petrolífera y de gas para hacer fracasar estas iniciativas. La Asociación de Petróleo y Gas de Colorado (COGA, en sus siglas en inglés) ha demandado posteriormente a Fort Collins, Longmont y Lafayette para minar estas votaciones democráticas para proteger la salud, la seguridad y la propiedad del fracking. El gobernador Hickenlooper también ha autorizado el uso de fondos públicos para entablar dos pleitos independientes contra Longmont por sus esfuerzos por proteger a sus ciudadanos del fracking.
A pesar de estas tácticas intimidatorias, los habitantes de las ciudades de Loveland, Greeley, Colorado Springs, Delta County y decenas de otras comunidades de todo el estado se han unido a otros cientos de miles de habitantes de Colorado para manifestarse a favor de proteger su salud, seguridad y propiedades de los métodos extremos de extracción de petróleo y gas mediante fracking.
«Ciudadanos por un Fort Collins sano apoya esta medida de control local porque creemos que todas las comunidades se merecen el derecho de proteger la salud y seguridad públicas y los valores de la propiedad en sus propias comunidades, como hemos hecho aquí en Fort Collins», afirmó Kelly Giddens, madre y fundadora de Ciudadanos por un Fort Collins sano. «Los habitantes de Colorado no deberían vivir con miedo de que el gobernador o la industria petrolífera y de gas presenten un pleito si intentamos proteger a nuestras familias y nuestras propiedades del fracking».
Una vez que se apruebe el documento de acuerdo con las leyes de Colorado y con los requisitos legales, Control local de Colorado tendrá que reunir 86 000 firmas antes del 4 de agosto para poder realizar la votación a nivel estatal en noviembre.
Para consultar una copia del documento de la votación, visiten: http://www.localcontrolcolorado.org
Traducción del artículo " Local Control Over Fracking To Be On the Ballot" traducido por Cristina López, miembro de Traductoras/es en Acción, la red de traductores/as e intérpretes voluntarios/as de Ecologistas en Acción
