viernes, 24 de enero de 2014
Cameron afirma que la captura de carbono puede hacer que el gas pizarra sea “más limpio“
David Cameron ha señalado que las nuevas tecnologías de captura del carbono, listas para ser probadas en Yorkshire, podrían desempeñar un papel fundamental a la hora de permitir que Reino Unido explote las vastas reservas de gas pizarra que se estima que se cree que están enterradas bajo el norte de Inglaterra.
El primer ministro espera que la industria emergente del “fracking” (fractura hidráulica) en el Reino Unido se desarrolle junto con las nuevas tecnologías de captura y almacenamiento del carbono (CAC), con el objetivo de enterrar de forma segura bajo tierra las emisiones de CO2 producidas por la quema de grandes cantidades de gas pizarra.
Cameron ha revelado que bloqueó los intentos del Partido Liberal Demócrata de establecer un nuevo objetivo vinculante de eliminación de todas las fuentes de energía que emiten CO2 en el sector energético del Reino Unido para el 2030. El objetivo de eliminación hubiera descartado las nuevas centrales eléctricas alimentadas con gas y carbón que entierran sus emisiones mediante CAC.
La negativa del Gobierno a adoptar el objetivo de descarbonización para 2030 provocó una disputa política importante el año pasado. Tanto los laboristas como los liberal-demócratas exigían a Cameron que aceptara el consejo de su propio comité asesor en materia de cambio climático y convirtiera a Gran Bretaña en el primer país en el mundo en amparar dicho objetivo en la ley.
Los principales fabricantes de aerogeneradores marinos, como Siemens —que planea establecer una gran plataforma industrial en Hull, Reino Unido—, también escribieron al primer ministro solicitando que adoptara el objetivo.
No obstante, en la comparecencia ante una comisión de diputados, Cameron señaló que la adopción de un objetivo vinculante supondría un "gran error" mientras el Reino Unido siga planteándose si los proyectos de CAC pueden funcionar a escala comercial. En cambio dio a entender que quiere dejar la puerta abierta a una Gran Bretaña alimentada por las centrales de gas pizarra que evitan liberar sus emisiones mediante CAC .
"Mi temor a ser demasiado franco acerca del futuro se debe únicamente a la cuestión de la CAC y al papel que va a desempeñar el gas en el futuro", respondió cuando le preguntaron sobre la meta propuesta para 2030.
"Hay quienes, dentro del movimiento ecologista, parecen muy dispuestos a concretar un objetivo de descarbonización sin tener en cuenta el posible funcionamiento de la CAC. Considero que sería insensato, por decirlo suavemente."
Esta semana, el primer ministro hizo sus declaraciones más directas, hasta la fecha, a favor del “fracking”, anunciando que el Reino Unido va "a por todas" con el gas pizarra. Los ecologistas, como la parlamentaria del Partido Verde, Caroline Lucas, han arremetido contra el enfoque del Gobierno haciendo hincapié en que las reservas de gas del Reino Unido deben permanecer bajo tierra como parte de la actual batalla contra el cambio climático.
Sin embargo, Cameron dejó claro que cree que el gas pizarra puede ser parte de la agenda verde del Reino Unido si también se tiene en cuenta la CAC.
"Tenemos una gran cantidad de reservas de gas —incluso más de gas pizarra", afirmó ante el comité. "Es barato y relativamente limpio".
"Un dato importante. Si fijan un objetivo de descarbonización y deciden no generar más electricidad con carbono antes de saber si se puede aplicar la CAC, creo que estarían cometiendo un gran error".
La postura positiva de Cameron hace que la continua prevaricación del Gobierno acerca del apoyo a los proyectos de CAC sea todavía más desconcertante. Los ministros de Energía insisten en que están avanzando en el proyecto White Rose de la empresa Drax, pero el progreso puede ser demasiado lento como para recibir una gran donación por parte de Bruselas por valor de cientos de millones de libras.