miércoles, 13 de enero de 2016

Desastre ambiental en Los Angeles por fuga masiva de gas natural: entrevista a Erin Brockovich


La fuga de gas natural en Porter Ranch emite 68 millones de kilos de gas metano y tardará meses en arreglarse



Una fuga de gas natural fuera de control en Los Ángeles ha emitido más de 68 millones de kilos de gas metano en lo que es ya el mayor desastre medioambiental desde el vertido de petróleo de BP. 

Miles de residentes de la comunidad de Porter Ranch, en California, han sido evacuados y realojados en hogares temporales. Los gases han provocado dolores de cabeza y sangrados de nariz. La entidad responsable, la compañía de gas Southern California Gas Company, estima que se puede tardar entre 3 y 4 meses en reparar la grieta.

Nos reunimos con dos invitados: Erin Brockovich, renombrada defensora del consumidor y asesora legal, que ayudó a ganar la mayor acción judicial popular en la historia de América y que en la actualidad trabaja con el fin de que haya justicia para las víctimas de la fuga de gas de Porter Ranch, y también con David Balen, presidente de la asociación de propietarios Renaissance Homeowners Association, situada junto al depósito dañado.
Esta es la transcripción de la entrevista mantenida con ellos:


Juan González: Nos centramos ahora en lo que ya es conocido como el mayor desastre medioambiental desde el vertido de petróleo de BP que tuvo lugar en 2010. Una fuga de gas, fuera de control, ha emitido más de 68 millones de kilos de gas metano desde el pasado mes de octubre de 2015. Miles de residentes de la comunidad de Porter Ranch han sido evacuados. Se han cerrado dos colegios y más de 2.000 familias se han visto obligadas a mudarse a hogares temporales. 

La fuga proviene de un depósito de almacenamiento que pertenece a la compañía de gas Southern California Gas Company, también conocida como SoCalGas. Se desconoce la causa exacta de la fuga, pero se cree que el recubrimiento del pozo pudo fracturarse bajo tierra, a mucha profundidad. A la confusión hay que añadir el hecho de que el gas metano es invisible, por lo que los vecinos no pueden ver los gases que les están causando esos dolores de cabeza y sangrados de nariz.



Amy Goodman: El metano es un gas de potente efecto invernadero que contribuye al cambio climático. La fuga es tan grave que el gas emitido supondrá una cuarta parte de todas las emisiones de metano del estado de California en solo un mes. SoCalGas dice que la reparación de la grieta podría llevarles entre 3 y 4 meses.

La compañía ha declinado nuestra petición de entrevista, pero han facilitado un comunicado en que declaran, citando textualmente, que “SoCalGas está trabajando con toda la rapidez y seguridad posibles para frenar la fuga de gas natural en su depósito de almacenamiento Aliso Canyon Storage Facility y estamos multiplicando nuestros esfuerzos para abordar su impacto sobre la comunidad y el medio ambiente”.

Bueno, para saber más, nos desplazamos hasta Los Ángeles. Nos reunimos con Erin Brockovich, la conocida defensora del consumidor. Siendo madre soltera de tres hijos y trabajando como asesora legal, ayudó a ganar la mayor acción judicial popular de la historia de América. Su historia fue contada en la película titulada “Erin Brockovich”, ganadora de un Oscar y protagonizada por Julia Roberts. Ahora trabaja para que haya justicia para las víctimas de la fuga de gas de Porter Ranch. Y también nos reunimos con David Balen, presidente de la asociación de propietarios Renaissance Homeowners Association, situada junto al depósito dañado.

No disponemos de mucho tiempo. Erin Brockovich, explique porqué se ha involucrado en este caso. Explíquelo a nuestros lectores de todo el mundo.



Erin Brockovich: Bueno, por desgracia, esto es algo que he estado haciendo a lo largo de mis 22 años de carrera, trabajar en grandes desastres medioambientales. Cuando ocurre alguno, a menudo la comunidad me busca. Y este caso en particular me es muy cercano porque, en realidad, soy su vecina. No vivo muy lejos del lugar del desastre. Y desde el primer momento en que vi lo que estaba sucediendo y oí de sus bocas lo que les estaba pasando, esto me hizo reaccionar, salir y ver qué podía hacer para ayudar a la comunidad.



González: Y, David Balen, ¿podría contarnos en qué momento comenzó a tomar consciencia del problema y qué fue lo primero que la compañía de gas comunicó a los vecinos de su comunidad?



David Balen: Por supuesto. ¿Sabe?, lo recuerdo como si hubiese ocurrido ayer. Fue el 23 de octubre, por la tarde. La comunidad estaba invadida por gases nocivos. Los vecinos creían que probablemente había una gran fuga en alguna de las casas. La compañía de gas apareció ante el público negando rotundamente que hubiera ni siquiera una fuga de gas. Fueron de casa en casa, dando el visto bueno a todas ellas. Y, ya sabe, la compañía de gas no admitió la existencia de la fuga hasta el miércoles siguiente, lo que nos sitúa en el 28 de octubre, habiéndose notificado al Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD, por sus siglas en inglés) ese mismo lunes, 26 de octubre, que algo estaba sucediendo y que nuestros hijos necesitaban protección. Los vecinos habían preguntado tanto a la LAUSD como a la SoCalGas, y les informaron de que no había ninguna fuga, hasta ese miércoles, cuando se les notifico que había una fuga enorme.



Goodman: Una secuencia de imágenes infrarrojas nos permite ver la fuga de gas metano. De acuerdo con los reguladores de la calidad del aire de California, la fuga supone el 25% de los gases de efecto invernadero que el estado emite cada día, una cantidad casi equivalente a la producida por la circulación 160.00 coches durante un año o al consumo de 340 millones de litros de gas. Erin Brockovich, usted se ha referido a esta fuga como el peor desastre medioambiental desde el vertido de petróleo de BP en 2010. Háblenos del alcance de esto.



Brockovich: El alcance es enorme. Y hay otro vídeo por ahí que de verdad nos ayuda a ver la contaminación. Porque, en mi opinión, como no la vemos, no siempre pensamos que es real. Y es alucinante. Parece un volcán en erupción que no va a detenerse nunca. Y cuando lo sobrevuelas con las lentes adecuadas y puedes verlo, porque el metano, ya sabe, los gases, no se pueden ver. Pero usando la pantalla adecuada, se ve como una columna de humo negra que se va hinchando. Y su tamaño es enorme.

Ya sabe, lo de BP fue algo que no pudieron parar, que ocurrió a mucha profundidad, y eso es exactamente lo que está ocurriendo ahí fuera. Y a medida que vamos indagando más en este tema, para descubrir qué ocurrió y por qué estamos en esta situación, resulta desconcertante la idea de que SoCalGas retirara válvulas de seguridad situadas a 8.000 pies de profundidad y que nunca llegara a reemplazarlas. Esas válvulas podrían haber evitado este catastrófico desastre. Así que estamos hablando de miles de de millones de litros de gas ahí abajo, y todo ese gas metano, día sí y día también, se está expandiendo y contaminando una enorme superficie. Es un continuo y constante asalto a la comunidad y un enorme consumo. En la actualidad, estamos trabajando con expertos para recabar toda la información y poder ver esa columna de humo y saber hasta dónde ha llegado.

Pero esto va a continuar. Se ha estado produciendo durante meses y va a continuar durante otros tantos. Como usted dijo, ¿a qué va a contribuir esto? Va a suponer una cuarta parte de todas Las emisiones del estado de California. Es indignante. Asusta, cuanto menos. Es terriblemente preocupante para esta comunidad. Están enfermos. Y los efectos continúan. Y eso es lo que lo hace tan catastrófico. Y nos asusta tener una compañía así, que quita una válvula, no la reemplaza y ahora no tiene capacidad para parar esto hasta dentro de 6 meses o más. El escenario es malo.



González: Y, Erin Brockovich, ¿cómo de transparente ha sido la compañía sobre dónde está la fuga exactamente y qué van a tener que hacer ahora para llegar hasta ella?



Brockovich: Bueno, no tengo ni idea de cómo de transparentes han sido. Y creo que David, como propietario y miembro de una familia de la comunidad, puede contarle en qué asuntos están dando largas. Lo que sí puedo contarle, mientras confirmamos todo esto y vemos qué no han hecho, es cómo va a cambiar todo esto la regulación, cómo va a ayudarnos a observar que necesitamos una mejor vigilancia legal en torno a estas instalaciones antes de que se produzca un desastre aún mayor que este. Las compañías no dan demasiada información a la comunidad sobre dónde se encuentran sus puntos de supervisión.

Si nos fijamos, en realidad esto no es muy razonable, porque no nos cuentan ni qué están haciendo ni dónde están supervisando. Por poner un ejemplo, están encontrando altos niveles de azufre de forma persistente en sus distintos puntos de supervisión, lo que es muy importante. Yo tengo alergia al azufre, como mucha otra gente. A largo plazo, esto puede tener efectos sobre la salud. 

También están encontrando hidrocarburos, no son muy claros en cuanto a qué están encontrando, pero lo están encontrando en grandes concentraciones.
Y esta comunidad necesita saber la verdad. Y si no nos dicen la verdad, nadie puede protegerlos. Así que no creo que SoCalGas haya sido en absoluto transparente sobre lo que han hecho en el pasado y lo que están haciendo ahora.



Goodman: Bien, David Balen. ¿Cómo están viviendo allí? Estamos viendo síntomas, ya sabe, los niños presentando síntomas, llevando mascarillas. ¿Les están ofreciendo ya un realojamiento total?



Balen: Bueno, sí. Llevamos inmersos en el proceso desde principios de diciembre de 2015. Estábamos fuera por las vacaciones de Acción de Gracias. No había motivo para empezar la evacuación porque estábamos fuera de la ciudad. Pero hemos estado sufriendo una falta de respeto como comunidad. La compañía de gas se está tomando su tiempo en reubicar a la gente. Alrededor de 2.200 familias han sido evacuadas. Quedan más de 7.000 familias esperando a ser reubicadas. Quiero decir, esto es terrible. El área afectada es cada día mayor. Y el gas no para. Y, afortunadamente, donde vivimos tenemos los vientos de Santa Ana (California). A veces soplan hacia el este, a veces soplan hacia el oeste. Así que algunos días son buenos y otros días son terribles. Ya sabe, la comunidad está sometida al olor del metano, que incluye mercaptanos, y son los mercaptanos los que están provocando que la comunidad enferme. Tenemos numerosos casos de personas con sangrados de nariz, con náuseas, animales vomitando, con lesiones en la cara. Es un no parar. Y la compañía de gas debe frenar esto. Deben ponerse las pilas y parar la fuga.



González: ¿Y cuál ha sido el papel de las autoridades estatales y de las autoridades sanitarias? ¿Cómo han presionado a la compañía de gas?



Goodman: ¿Y de Jerry Brown, el gobernador?



Balen: ¿Sabe qué? Los hago responsables a todos ellos, desde Jerry Brown hasta Eric Gacetti o mi concejal, Mitchell Englander. Todos se han tomado su tiempo. Recientemente Mitchell Englander ha sido honesto, pero todos ellos han estado desaparecidos en combate durante las primeras cinco semanas de este desastre. Y, como sabe, cuando este asunto llegue a su punto final va a ser, como poco, desastroso. Va a ser grande, espectacular, y va a afectar, no solo a esta comunidad, sino al mundo. Este metano va a tener un efecto invernadero enorme.



Brockovich: Es una muy buena pregunta. Sin embargo, me gustaría entrar aquí en el tema de las agencias, que no se han implicado en absoluto. Y confirmamos de nuevo que tanto el Departamento de Sanidad como las agencias estatales han mostrado una total falta de supervisión de lo que ha estado ocurriendo en la que es la segunda mayor reserva de gas natural en Estados Unidos.



Balen: Así es.



Brockovich: Y estas agencias deberían tener una supervisión mucho más estricta, y no la tienen. Nosotros ...



Goodman: Quiero decir, el gobernador Brown coincidió con nosotros en París, en la cumbre del clima de la ONU.



Balen: Por supuesto. Y también estaba Eric Garcetti.



Brockovich: Sí. Y este fue uno de los temas de conversación allí. Esta comunidad realmente necesita que se declare el estado de emergencia. Y, ya sabe, la gente no quiere decir “evacuación”. Y yo opino que esto es algo que debemos analizar, porque este es un territorio muy grande y quizá estas personas sí que necesiten ser evacuadas, hasta que esta situación esté bajo control y se pueda asegurar que su regreso es totalmente seguro. Por lo tanto, las agencias han cometido fallos. Da la sensación de que el Estado y el gobernador han sido lentos en sus respuestas. Esto es...



Goodman: Vamos a tener que dejarlo aquí pero, por supuesto, seguiremos con este tema. Erin Brockovich, conocida defensora del consumidor, David Balen, residente de Porter Ranch, muchas gracias por reuniros con nosotros en Los Ángeles.



Publicado en Democracy Now! el 4 enero, 2016

Traducción realizada por Marta Ruiz Carlet, miembro de Traductoras/es en Acción, la red de traductoras/es e intérpretes voluntarios/as de Ecologistas en Acción.