lunes, 8 de junio de 2015

Las renovables, mejor inversión que el petróleo barato

Con el desplome de los precios del petróleo desde el año pasado, ha habido mucho debate acerca de lo que esto implica para el futuro de los combustibles fósiles como fuente de energía y como fuente de emisiones de carbono que afectan al cambio climático. Los precios del petróleo cayeron a menos de la mitad del máximo de los últimos seis meses de 2014, generando una situación inestable para los negocios y la economía.
Oil prices have historically been volatile, so turning away from renewables just because oil prices are currently low is risky and short-sighted. Photo credit: Shutterstock

La Comisión Global para el Clima y la Economía, que incluye a líderes gubernamentales, financieros, empresariales y económicos, ha publicado un informe, “Oil Prices and the New Climate Economy”, que perfila las implicaciones económicas de la volatilidad de los precios del petróleo y cómo los gobiernos deberían afrontarlo.
Reaccionar ante la reciente caída de los precios del petróleo es cualquier cosa menos fácil para los que toman las decisiones económicas” dice el informe. “En el corto plazo, los países consumidores pueden estar encantados con la mejora de su balanza de pagos, o los productores preocupados por un una inesperada reducción del PIB o incrementos del déficit presupuestario. Pero comprender el impacto más allá de unos pocos años es mucho más complicado”.
Sugiere, en primer lugar, que los países, empresas y consumidores satisfechos con los bajos precios del petróleo que aprovechan la oportunidad para aumentar su dependencia del petróleo, deberían considerar el escenario a largo plazo. Mientras que los bajos precios están haciendo que los países consumidores ahorren cientos de millones de dólares al año, históricamente, los precios del petróleo han sido inestables. El informe propone que, por este mismo motivo, y a pesar del aparente atractivo del consumo de petróleo dado su precio actual, es el momento ideal para invertir en fuentes de energía renovables.
El informe advierte que es posible que resulte tentador para los gobiernos y las empresas dejar de lado la inversión en renovables y en mejorar la eficiencia energética, pero que este sería el camino equivocado, ya que aumentaría la vulnerabilidad a los cambios en los precios que son normales en el mercado del petróleo y que son inevitables en el futuro.
Los gobiernos deberían vincular sus políticas a las tendencias energéticas en el largo plazo, en lugar de apostar por que los precios del petróleo se mantengan bajos", afirma Lord Nicholas Stern, uno de los coautores del informe y copresidente de la Comisión Global para la Economía y el Clima. “Estos precios nunca han sido estables y los vaivenes se están volviendo más drásticos y frecuentes que nunca. En su lugar, los gobiernos deberían de incentivar la inversión en energías renovables que sean cada vez más competitivas, y apartarse definitivamente del actual y desfasado modelo económico basado en el carbón, que no es sostenible. Dejar pasar esta oportunidad sería devastador para la salud de nuestra economía y de nuestro planeta."
El informe sugiere que los gobiernos se preparen para afrontar futuros incrementos en los precios del petróleo estableciendo precios fijos para el carbón y dejar de lado los subsidios a los combustibles fósiles. Señala que en 2013, los subsidios a los combustibles fósiles alcanzaron los 550 mil millones de dólares, “fomentando el despilfarro, constriñendo el gasto público y debilitando el crecimiento mediante la reducción de la inversión en el sector energético.” Docenas de países, afirma, están ya reformando los subsidios a los combustibles fósiles o lo están tomando en consideración.
Reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles es más fácil que nunca”, dice Per Klevnäs, director del Instituto Medioambiental de Estocolmo y coautor del informe. “Hace un año o dos, los consumidores pagaban el doble por la gasolina que ahora, lo que significa que es posible que no noten unos céntimos extra por cada litro de gasolina debido a los precios del carbón y a la reducción de los subsidios energéticos. El aumento de los ingresos podría ser usado para compensar el impacto sobre las familias con bajos ingresos y para financiar reducciones en otros impuestos distorsivos.”
El informe añade que la energía solar, eólica y otras renovables ofrecen el potencial de estabilidad en el largo plazo, costes competitivos, reducciones de costes futuras, seguridad energética y una reducción de los costes sanitarios debido a la reducción de la contaminación del aire.
En el largo plazo, las renovables son más seguras que apostar por combustibles fósiles”, concluye el informe. “Tienen poco o escaso coste operativo una vez han sido instaladas, y por lo tanto no existe volatilidad en los precios. Esto significa que las renovables pueden contener de forma efectiva los costes de la energía durante 20 años o más. Además, el precio de instalar plantas de generación de energía eólica o fotovoltaica continua descendiendo, haciendo que las renovables sean competitivas incluso con el gas natural barato en muchos sitios.


"Traducción del artículo "Why Renewables Are a Better Investment Than Cheap Oil to Grow the Global Economy" publicado en Ecowatch el 12 de mayo de 2015, realizada por Luis Manuel Carrera, miembro de Traductoras/es en Acción, la red de traductoras/es e intérpretes voluntarios/as de Ecologistas en Acción".