jueves, 28 de mayo de 2015

Directivo de Shell afirma que los detractores de los combustibles fósiles “ignoran la realidad”


El CEO de Royal Dutch Shell le dijo a los defensores del medio ambiente el martes que sus pedidos dirigidos a los inversores para que se desprendan de sus acciones de los principales grupos del sector energético “ignoran la realidad”.



Ben van Beurden realizó una sólida defensa de la industria del gas y el petróleo en la reunión anual del grupo anglo-holandés en La Haya, al sostener que los combustibles fósiles eran necesarios para hacer frente a la creciente demanda de energía, especialmente en mercados emergentes.


Sus declaraciones, respondiendo preguntas de los accionistas, llegan en medio de una campaña tendiente a convencer a los inversores de que las empresas de combustibles fósiles son una apuesta cada vez más riesgosa mientras aumentan los esfuerzos regulatorios para combatir el cambio climático y la contaminación del aire y los costos de las energías alternativas disminuyen.


La idea de “activos obsoletos”, aquellos que sufren una pérdida de valor no prevista, es una nueva y más sofisticada arma en la artillería de los detractores de los combustibles fósiles, que con frecuencia, han sostenido que los imperativos del cambio climático por sí solo exigen terminar con los combustibles fósiles.


Este argumento, también llamado la teoría de la “burbuja de carbono”, sostiene que las acciones de los productores de combustibles fósiles están sobrevaluadas debido a que gran parte de su producto tendrá que permanecer en el suelo si el calentamiento global se va a mantener dentro del límite de 2 grados Celsius.


El argumento de los activos obsoletos, la ‘burbuja de carbono’, es . . . un argumento que suena bastante convincente y sólido,” afirmó van Beurden. “Pero la realidad es que el 80 por ciento del total de la matriz energética está compuesta por combustibles fósiles, lo ha estado durante varias décadas y lo seguirá estando por varias décadas más.”


La causa de los ambientalistas es fácilmente ignorada por los inversores, al menos a corto plazo, debido a que los empresas petroleras son una de las mayores fuentes de dividendos y las normas que rigen las obligaciones fiduciarias obligan desde hace tiempo a los grandes fondos de inversión a darle prioridad a los retornos financieros sobre las preocupaciones ambientales o de otro tipo.


Si no invirtiéramos en combustibles fósiles, en petróleo y gas, particularmente en gas y petróleo durante los próximos 35 años, tendríamos una caída de alrededor de 85 millones de barriles diarios de petróleo,” sostuvo van Beurden, señalando que se prevé que tres mil millones de personas “pasen de la pobreza a la clase media” en las próximas décadas.


Esa inversión aún debe hacerse... entonces la idea de que de repente el gas y el petróleo de alguna manera  dejarán de ser necesarios simplemente no es una realidad,” él agregó.


Shell también recibió duras críticas por su decisión de reiniciar la exploración en el Mar de Chukotka en el Ártico.


El Sr. van Beurden declaró que el grupo había realizado “enormes esfuerzos” para gestionar los riesgos asociados con el proceso de perforación. Shell ha manifestado que, si la exploración resulta exitosa, es probable que transcurra una década o más antes de que la producción funcione plenamente.


Por otro lado, el grupo anunció que había recibido una oferta de €464 millones de la compañía DCC Energy, parte del grupo irlandés DCC, por Butagaz, su empresa productora de gas licuado de petróleo en Francia.

Traducción del artículo "Royal Dutch Shell chief says fossil fuel critics ‘ignore reality’ " publicado en Financial Times, May 19, 2015