miércoles, 16 de abril de 2014

ExxonMobil busca sortear la moratoria alemana con el fracking verde



La empresa ExxonMobil está incrementando sus esfuerzos para ganar la confianza de los detractores de las prácticas de fractura hidráulica en Europa mediante el desarrollo de una generación de fluidos de fractura hidráulica que no implicaría peligro alguno para el medio ambiente.
El US Group, la mayor petrolera del sector privado en los Estados Unidos afirmó que ha desarrollado fluidos atóxicos específicamente pensados para las condiciones geológicas de Alemania. Dichos fluidos todavía necesitan probarse bajo las condiciones del suelo.

De acuerdo con las investigaciones, los químicos usados para la práctica de fractura hidráulica en los EE.UU, los que se mezclan con arena y agua y se bombean dentro de la tierra para quebrar las rocas cargadas con gas, son potencialmente perjudiciales para la salud de las personas y para la vida silvestre.

En un estudio publicado en una revista revisada por pares, los investigadores de la Universidad de Missouri descubrieron que los químicos que se utilizan generalmente para la fractura hidráulica pueden alterar las hormonas que regulan las funciones corporales, incluida la reproducción.

Según un estimado realizado por un instituto de geo ciencias del gobierno, empresas como Exxon han conseguido permisos para buscar combustible en Alemania, cuya cifra se ha elevado a 2.3 toneladas de metros cúbicos de gas de esquisto recuperable.

De acuerdo con las estimaciones de la Administración de Información de la Energía en EEUU, las reservas estimadas de Alemania son significativamente menores que las de Polonia y Francia, las que poseen las mayores reservas recuperables en Europa. Sin embargo, las reservas de Alemania tienen el potencial de proveer un suministro interior de energía a largo plazo.

Los productores alemanes de alto consumo de energía han visto el auge del esquisto en EEUU con recelo y existe una creciente preocupación de que Alemania necesite encontrar una alternativa a su dependencia para con Rusia, quien le provee alrededor de un tercio de la demanda de gas.

Sin embargo, el gobierno de coalición de Angela Merkel ha impuesto una moratoria en lo relativo a las prácticas de fractura hidráulica citando preocupaciones ambientales.
El acuerdo de la coalición indica que las solicitudes para fracturar pueden ser autorizadas sólo si “no existe duda alguna” que no habría riesgo para la calidad del agua y que no se utilizarían químicos perjudiciales para el medio ambiente.

El líder adjunto de los demócratas cristianos bajo la Sra. Merkel en el Bundestag, Michael Fuchs, reclamó recientemente “el avance de proyectos pilotos (de fractura hidráulica)” y afirmó que Alemania no debería catalogarla como una tecnología de riesgo como la energía nuclear.

Sus dichos generaron una discusión en la coalición dominante, con la ministro de Medio Ambiente Barbara Hendricks, un miembro de los Demócratas Socialistas, quien describiera la fractura hidráulica como una ilusión en un país tan densamente poblado como lo es Alemania.

La empresa Exxon en Alemania confirmó que ha desarrollado fluidos provenientes de fractura que no resultaban ni tóxicos ni peligrosos para el medio ambiente. Cuando indagaron acerca de qué impacto esto podría tener en un debate político, Exxon se reservó los comentarios.

Halliburton, una empresa de servicios petroleros, también afirmó que habían desarrollado fluidos provenientes de la industria de la alimentación que aportan un “margen extra de seguridad” para las personas, los animales y el medio ambiente. La fórmula de Halliburton está en uso en al menos un pozo en la formación de esquisto de Haynesville en el sur de los EEUU.

Traducción del artículo "ExxonMobil fracking fluid aims to curb environmental impact" publicado el 10 de abril en Financial Times