lunes, 28 de octubre de 2013

Los riesgos climáticos de una dependencia excesiva del gas natural para la fabricación de electricidad




Traducción del artículo "The Climate Risks of an Overreliance on Natural Gas for Electricity", publicado en Clean Energy el 4 de octubre de 2013)
El gas natural es un combustible fósil. Cuando se quema produce dióxido de carbono que atrapa calor, y genera otras emisiones de efecto invernadero cuando se producen fugas durante su extracción y distribución a través de los gaseoductos.
 
Por lo tanto, si Estados Unidos pasase de un sistema de producción de electricidad a partir del carbón a un sistema basado en el gas, se producirían emisiones de efecto invernadero sustanciales - y se fracasaría al intentar evitar los crecientes daños producidos por el cambio climático.

El gas natural debe jugar un papel en el suministro energético de Estados Unidos, pero un exceso de confianza en el gas natural a largo plazo no permitirá alcanzar la reducción de emisiones necesaria para hacer frente al calentamiento global. En su lugar, Estados Unidos debe invertir para lograr un futuro basado en la electricidad de bajo carbono mediante la generación de una mayor cantidad de electricidad con fuentes de energía renovables  y la mejora de la eficiencia energética.
(descargar el informe: "El límite del gas. Evaluando los riesgos climáticos de una dependencia excesiva del gas natural para la fabricación de electricidad")
Estados Unidos se está moviendo hacia un sistema eléctrico dominado por el gas natural.

 (gráfica: previsión del mix eléctrico 2010-2050)


  • El sector eléctrico de Estados Unidos está experimentando su mayor transformación en medio siglo ahora que las compañías eléctricas están abandonando muchas plantas de combustión de carbón antiguas y no competitivas a nivel económico. En 2008, el carbón generó el 48% de la energía nacional. En 2012, solamente produjo el 37%.
  • El gas natural está reemplazando la mayor parte de la electricidad producida mediante la combustión de carbón. Entre 2008 y 2012, la cantidad de electricidad generada con gas natural se incrementó en más de un 50%.
  • Si las tendencias actuales continúan, el gas natural representará dos tercios de la electricidad de Estados Unidos en 2050.
Un sistema eléctrico dominado por el gas natural conlleva riesgos climáticos significativos y no representa una solución a largo plazo para el calentamiento global
  • El sector energético eléctrico es el que más contribuye a las emisiones caloríficas globales de Estados Unidos y actualmente suma un tercio de las emisiones nacionales totales, aproximadamente. Para limitar algunas de las peores consecuencias del cambio climático, Estados Unidos necesita recortar las emisiones del sector eléctrico vinculadas al carbono en un 90% antes de 2050, como recomienda el Consejo Nacional de Investigación (NRC).
  • Si Estados Unidos continúa su trayectoria hacia un sistema eléctrico dominado por el gas natural, el sector eléctrico generaría hasta tres veces el nivel de emisiones de carbono recomendado por el NRC.
  • Existen otros gases caloríficos asociados al gas natural aparte de las emisiones de carbono. La perforación y extracción de gas natural, y su distribución mediante gaseoductos, también conlleva fugas de metano - un componente primario del gas natural que es 25 veces más fuerte atrapando calor que el CO2.
 

 CHART: Projected emissions from U.S. electricity sector exceed NRC carbon budget

Un papel apropiado del gas natural en un sistema eléctrico de bajo consumo
  • A pesar de que reemplazar el carbón por gas natural no es una estrategia climática efectiva a largo plazo, el gas natural ofrece algunas ventajas en el corto y medio plazo, y podría jugar un papel discreto en el futuro de la energía limpia.
  • Por ejemplo, quemar gas en lugar de carbón tiene beneficios inmediatos para la salud pública y el medioambiente, dado que el gas natural emite cantidades muy inferiores de hollín y sustancias contaminantes tóxicas, y no emite niveles apreciables de mercurio, arsénico y otras sustancias tóxicas.
  • Dado que los generadores de gas natural pueden aumentar y mermar rápidamente, pueden apoyar la integración de fuentes renovables variables, contribuir a un suministro eléctrico de confianza y ser utilizados rápidamente durante períodos de demanda de electricidad extremadamente elevada.
Para hacer frente de forma efectiva al calentamiento global, Estados Unidos debe invertir en el desarrollo de energías renovables y el aumentos de la eficiencia energética.
  • Las fuentes de energía renovable, tales como las energías eólica y solar, generan pocas o ninguna emisión de efecto invernadero y, junto con la mejora de la eficiencia energética, juegan un papel esencial a la hora de desarrollar el sistema eléctrico bajo en carbono.
  • Para cumplir con el presupuesto de carbono de la NRC para el sector eléctrico, Estados Unidos necesita hacer una fuerte inversión en eficiencia energética e incrementar la cuota de energías renovables sobre el total de suministro energético hasta el 25% en el año 2025 y el 80% en el año 2050.
  • Para cumplir esos objetivos, Estados Unidos necesita establecer políticas inteligentes que lleven a la nación hacia un futuro eléctrico bajo en carbono, incluyendo la promulgación de fuertes estándares federales para plantas de energía, adoptando fuertes políticas estatales y federales sobre energías limpias, reforzando regulaciones para fracturar hidráulicamente el gas natural y creando un terreno de juego igualado para todas las tecnologías de bajo carbono.
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