La búsqueda de gas y petróleo no convencional
empleando la técnica de la fracturación
hidráulica, también llamada fracking,
ha sido intensa en la última década en Estados
Unidos. Pero en Europa se trata de un
fenómeno muy reciente, que se enfrenta a
las protestas ciudadanas en muchos países
del continente.
En el Estado español se han multiplicado
en los últimos años los permisos de investigación
de hidrocarburos solicitados y concedidos.
La elevada falta de transparencia
relativa a estas licencias por parte de las administraciones
públicas, impide, en muchos
casos, saber el fin último de estas exploraciones.
Los permisos generalmente no especifican
sin son para la búsqueda de hidrocarburos
convencionales o no convencionales. En
este último caso son susceptibles de utilizar
la técnica del fracking.
Se puede en todo caso deducir que un gran
número de permisos solicitados y concedidos
emplearán el método de fractura hidráulica
bien por haber sido solicitadas en
los últimos tres o cuatro años, coincidiendo
con el “boom” de permisos para gas y petróleo
no convencional en Europa, bien por
provenir de empresas conocidas por dedicarse
al fracking.