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miércoles, 6 de septiembre de 2017

El apoyo público al fracking en Reino Unido, bajo mínimos

Only 16% people surveyed by Business and Energy Department supported fracking compared with 21% last year. De acuerdo con la última investigación del gobierno, el apoyo del público al fracking ha alcanzado su punto más bajo.

Una encuesta realizada por el Departamento de Energía británico mostró que solamente el 16% de los participantes respaldaban el controvertido proceso de extracción de gas de esquisto. Una cifra que no solamente descendió con respecto al año anterior cuando alcanzaba el 21%, sino que también ahora alcanza el porcentaje más bajo en 5 años, desde que se lanzó el estudio.

Solo un 13% de las dos mil personas entrevistadas dijeron tener amplios conocimientos acerca del fracking y cerca de la mitad dijeron entender solo “un poco” sobre el asunto.

Según los grupos anti-fracking, los resultados demostraron que la industria estaba llevando a la política energética en la dirección equivocada.

La activista en cuestiones de energía del grupo Greenpeace Reino Unido, Elisabeth Whitebread, dijo que la opinión pública con respecto al fracking estaba en “caída libre” y agregó: “Las comunidades no desean la innecesaria industrialización del país a causa del gas de esquisto que no necesitamos. Más de tres cuartos de la población está a favor de los recursos renovables, por lo tanto, el gobierno debería prestar atención a sus encuestas de opinión, ser fiel a su promesa y favorecer la energía eólica marina y solar en lugar de una nueva industria de combustibles fósiles. La preocupación por el cambio climático alcanzó su punto más alto desde el año 2012; y para cumplir con nuestros objetivos climáticos debemos dejar los combustibles fósiles en el suelo. La industria del fracking está llevando a la política energética del Reino Unido en la dirección equivocada y la población está en lo correcto cuando se preocupa”.

Rose Dickinson, activista de la Red Amigos de la Tierra dijo: “Esta es una mala lectura para la industria, ya que son conscientes de que están peleando de manera desesperada una guerra imposible de ganar, en la que el premio es el apoyo. El grado de aceptación del público que ha perdido esta industria es innegable. La oposición aumenta no solo en las zonas donde se propone el fracking sino también a lo largo de todo el país”.

Un portavoz del Departamento de Energía declaró: “Existen numerosos mitos en torno a los supuestos riesgos del fracking que no cuentan con evidencia que los respalde y esta encuesta muestra que la gran mayoría de las personas entrevistadas manifestaron no conocer mucho sobre el asunto.
Tenemos más de 50 años de experiencia en perforación en el Reino Unido y alentamos a las personas a que miren más allá del alarmismo y vean los beneficios que la industria puede traer, entre ellos una mayor seguridad energética, miles de empleos y crecimiento económico”.

La encuesta reveló que el motivo más común para avalar el fracking era la necesidad de utilizar todas las fuentes de energía disponibles y, de este modo, reducir la dependencia en otros combustibles fósiles y en otros países como suministros de energía y, asimismo, que sea una cuestión positiva para los puestos de trabajo e inversiones locales.

El motivo más común para oponerse al fracking era la pérdida o destrucción del medio ambiente natural, el riesgo de contaminación de los suministros de agua, cuestiones de seguridad y riesgo de terremotos.

Traducción del artículo "Public support for fracking in the UK at record low, official survey reveals" publicado el 3 de agosto de 2017 en The Guardian.