martes, 3 de julio de 2018

Industria gasística: Somos un combustible objetivo, no una transición

Resultado de imagen de natural gasLos dirigentes de la industria del gas en la Conferencia Mundial de Gas tienen un mensaje para los defensores de las energías renovables: No somos vuestro combustible de transición.
El gas natural ha sido ampliamente promocionado como una fuente de energía que puede desplazar al carbón a lo largo del mundo y servir como combustible puente hasta que los sistemas energéticos más limpios, basados en renovables como eólica o solar, puedan tomar el relevo. Pero los directivos de la industria del gas dijeron que las renovables por sí solas no podrán abordar las necesidades energéticas mundiales y necesitarán al gas para alimentar las centrales energéticas cuando el sol o el viento no estén disponibles.

“Me gusta el concepto del gas como un combustible objetivo y no una transición”, dijo Patrick Pouyanné, Director General de Total S.A., esta semana en la conferencia.

Los directivos del gas argumentaron que las renovables no pueden dar respuesta a la creciente demanda energética, y el gas natural será necesario durante décadas. Incluso los países de la Unión Europea que han acordado fuertes recortes en las emisiones de efecto invernadero tienen la esperanza de construir nuevos gasoductos y terminales de GNL que mantendrán al gas fluyendo durante varias décadas, una tendencia que requerirá la captación y aislamiento del dióxido de carbono que produce.
“Sí, la electricidad renovable crecerá masivamente, pero necesita un aliado” dijo Klaus Schäfer, Director General de la compañía energética alemana Uniper SE. “Obviamente el gas mismo debe ser descarbonizado, el gas debe hacerse verde si quiere formar parte de un futuro descarbonizado en Europa”.

Otros directivos de energéticas dijeron que la gran escala de la red energética requerirá un combustible como el gas durante décadas. Incluso con su rápido crecimiento en los últimos años, la eólica y la solar sólo proporcionan menos del 8 por ciento del suministro energético de EEUU.
“Tenemos que llegar a un punto de no hablar de 100 por cien de renovables, simplemente no puede ocurrir”, dijo Barry Perry, Director general de Fortis, una empresa de gas y energía que opera en EEUU y Canadá, a POLITICO. “Cuando hablamos sobre la gran red, es necesaria esa generación base para hacerla funcionar… Podemos hacer cada vez más renovables con el tiempo, pero la red va a necesitar alguna generación base durante mucho tiempo de aquí en adelante”.

Los directivos del gas reconocieron que las renovables seguirán creciendo rápidamente y dijeron que las turbinas de gas proporcionarán servicios de arranque de la red energética así como mantendrán las luces encendidas cuando la eólica o la solar no puedan. Y con recientes estudios de la Energy Information Administration, la International Energy Agency y otros, que sugieren que es presumible que la demanda energética mundial se dispare al electrificarse los países en desarrollo, el gas seguirá siendo necesario.

“Este es un reto a una escala a la que la humanidad no se ha enfrentado hasta ahora”, dijo De la Rey Venter, vicepresidente ejecutivo de Shell’s Integrated Gas Ventures a una audiencia el martes. “Las energías renovables jugarán un papel primordial para alcanzar este reto. Pero las renovables por sí solas no pueden transformar el sector energético. El gas es hoy idóneo para manejar la variabilidad de solar y eólica”.

Directivos como Perry y Didier Holleaux, vicepresidente ejecutivo de la francesa de suministros Engie, dijo que dudaba de que las renovables pudieran lidiar con la enorme demanda energética que se espera con la expansión de las redes eléctricas de los países asiáticos y la reducción de la dependencia de los vehículos en combustibles procedentes del petróleo. Y a pesar de algunos éxitos recientes de proyectos de almacenamiento de renovables en los EEUU, no creen que los acumuladores puedan competir con el gas natural para suministrar la cantidad de energía que será necesaria.

“En comparación las baterías siempre serán un orden de magnitud en costes – 1.000 veces más caras, hoy son 2.000 veces más caras”, dijo Holleaux. “Incluso si crees que el coste bajará, el coste de almacenar energía en el gas es mucho más barato”.

Los directivos del gas aún ven al carbón como su principal competidor, no a las renovables.
“Fuera del mundo desarrollado, la cuestión es obtener energía de manera creciente”, dijo Laurent Vivier, presidente de gas de Total. “Hay una elección que para ellos es muy obvia: hay carbón por un lado y gas por el otro”.

“América tiene demostrados recursos de gas para 100 años. Canadá para 200 años”, añadió. “Es un recurso increíblemente abundante, es un combustible básico, no un combustible de transición”.



Traducción del artículo "Gas industry: We're a destination fuel, not a transition" publicado el 28 de junio de 2018 en POLITICO